12 de noviembre de 2022, un vecino de Vilamarxant (Valenciana) llama a la Policía Local porque dice haber sorprendido a su vecina "rebuscando" dentro de su habitación. Mientras aguardaba la llegada de las autoridades, puso en funcionamiento la grabadora de su móvil.

Según él, para dejar constancia de que estaba tratando bien a la persona que tenía retenida. Pero los agentes lo acaban deteniendo a él y le requisan el móvil... El aparato sigue grabando la conversación entre los agentes, que dudan sobre la detención. Unos audios que adelantaba este miércoles 'elDiario.es' y en los que se pueden escuchar a una agente preguntándole a un superior lo siguiente: "Lo tengo aquí que me está generando dudas de si procedía la detención o no (...) ¿Y qué hago? Lo tengo en el calabozo". Y luego añade: "¿Lo suelto como si no hubiese pasado nada? (...) ¿Digo que se ha puesto violento contra nosotros o algo?".

Después, le traslada sus nervios al compañero con el que, al parecer, ha practicado la detención. "Está muy cogido con pinzas", le dice. "Nos hemos calentado", le responde el otro agente. Finalmente, se les escucha tomar una decisión: "Tenemos que poner que estaba violento. (...) Voy a poner, a ver si te parece... Que como yo me he ido dentro y él estaba solo contigo, que él se estaba poniendo violento fuera por lo que he cerrado, he salido y estaba como que iba hacia ti con la mano y lo he enganchado y lo hemos detenido".

Indignación con el Ayuntamiento

La transcripción completa del audio refleja que fue, al perecer, una detención pacífica. Incluso que el chico se había "portado bien", en palabras de los propios policías. El detenido acabó denunciando a los policías locales por detención ilegal, denuncia falsa y falsificación documental.

El Ayuntamiento no ha tomado ninguna medida contra los agentes, y la oposición está indignada. El concejal del PSPV en Vilamarxant, Julio Montesinos, afirma que "estas cosas pueden motivar la preocupación de la ciudadanía, porque se pueden estar vulnerando los derechos de un ciudadano, que es algo sagrado". Porque, aunque el caso se sobreseyó, ahora lo ha reabierto la Audiencia Provincial de Valencia.