Todos los arrestados son
españoles con edades de entre 20 y 47 años, y los dos autores materiales tras
cometer los delitos se escondían en un domicilio de la ciudad alicantina de
Santa Pola, informan ambos cuerpos.
La investigación se
inició a principios del mes de octubre tras un atraco con arma de fuego
ocurrido el día 5 en una entidad bancaria de Castellbisbal. A las 13:10 horas
un atracador accedió a la sucursal y pidió el dinero a uno de los tres
trabajadores amenazándolo un arma de fuego.
Tras coger dinero de los
diferentes cajones también se apropió de una bolsa que contenía 12.000 euros,
con lo que sustrajo un total de 20.000 euros. Los investigadores descubrieron
que los implicados habían cometido dos atracos anteriores, el primero de ellos el
27 de septiembre cuando dos hombres entraron en una empresa de Reus y
exhibieron un arma de fuego, aunque no consiguieron abrir las cajas fuertes y
huyeron sin botín, después de dejar a un trabajador herido a causa de los
golpes.
Tampoco consiguieron
botín el pasado 4 de octubre, en un atraco en un establecimiento en Vilafranca
del Penedès en el que utilizaron dos armas de fuego. La investigación se centró
en localizar y detener al líder del grupo, que tenía numerosos antecedentes, y
se comprobó que mantenía contactos en Santa Pola con otro hombre, que resultó
ser otro de los sospechosos; ambos fueron detenidos en esa localidad
alicantina.
En los registros en los
domicilios de los investigados, en Santa Pola y El Vendrell (Tarragona) se
encontraron un arma de fuego detonadora que había sido modificada y habilitada
para disparar, una defensa eléctrica, otra extensible, un aerosol de defensa,
munición real, unos 4.550 euros y aparatos de telefonía móvil.
Finalmente, los policías
detuvieron en Reus a una mujer y a otro hombre relacionados con los hechos. Los
cuatro detenidos fueron puestos a disposición judicial y se decretó el ingreso
en prisión de los dos primeros arrestados, quedando los dos últimos en libertad
con cargos.