José Miguel Torán recibió 100 perdigonazos por todo el cuerpo cuando iba en bici por un monte cercano a Alicante: un cazador disparó contra un conejo y le alcanzó. La Policía Nacional investiga si hubo imprudencia porque los cazadores tenían todo en regla: varios lo vieron, pero el que le hirió, no. Todo comenzó en la mañana del pasado domingo. La víctima había salido con su bicicleta para circular por una serie de sendas.

Sin embargo, su ruta se cruzó con la de un grupo de cazadores. "Nuestro compañero, al ver salir a un conejo, disparó, justo cuando el ciclista se había metido en la trayectoria", ha contado uno de los cazadores presentes en los hechos. Aseguran que no le habían visto antes, que fue una fatalidad. De hecho, él mismo sabe que fue accidental, pero ha reclamado desde el hospital que se revise el uso de espacios recreativos.

"Afortunadamente, no me han dañado ningún órgano vital, pero sí me limita la movilidad y podrían haber sido daños mucho más graves", ha señalado el ciclista herido. Fueron los mismos cazadores los que llamaron al 112. En este sentido, han insistido en que no estaban haciendo nada ilegal en esos momentos porque el escenario donde ocurrió todo es una zona común de caza, y además tenían toda la documentación en regla.

Así lo ha señalado también Carmen Soriano, miembro del Gabinete Técnico de la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana: "Están federados y se encuentran en posesión de todos los permisos y seguros". En contraposición, denuncian que los ciclistas se salen a menudo de los caminos. Sin embargo, desde el Ayuntamiento de Alicante han confirman a laSexta que está permitido este deporte en estas rutas.

De todas maneras, van a reclamar a la Generalitat que revise la señalización de la zona. El ciclista ahora se recupera en el Hospital San Joan de Alicante. Del centenar de perdigones que recibió apenas le han podido extraer 15. "La verdad es que nunca había escuchado de un accidente así, pero afortunadamente esta vez me pilló a mi solo, y no con mi familia", ha apuntado José Miguel.