La Guardia Civil ha detenido a 30 personas y ha desmantelado la mayor red de contrabando de medicamentos. Sólo en las farmacias investigadas en Aragón se ha detectado la venta ilegal de más de 123.000 envases, con una facturación superior a 1,46 millones de euros.

Además de los 30 integrantes de la red arrestados, otras dos personas han sido imputadas por delitos contra la salud pública, falsedad documental, contra la Hacienda Pública, la Seguridad Social y de pertenencia a grupo criminal. Hay catorce farmacias y siete almacenes implicados.

El método con el que actuaba la red era el conocido como 'distribución inversa', que consiste en la venta legal de un número determinado de medicamentos que un almacén distribuidor o un laboratorio realizan a una o varias farmacias. Estas, junto con otro almacén distribuidor, se quedaban con un pequeño número de medicamentos para dispensarlos a los pacientes.

El resto de medicinas se enviaban al almacén distribuidor que los depositaba en almacenes legales o ilegales para su almacenamiento. Estos últimos, más tarde, se encargaban de la venta en la UE en Alemania, Reino Unido, Bélgica, Dinamarca, Holanda, Austria y Grecia y también en terceros países.

Una vez fuera de españa utilizaban a los llamados bolseros para efectuar la entrega. Una red perfectamente organizada hasta que la Guarida Civil ha puesto fin a su entramado.

La red obtenía los medicamentos en las farmacias, ya que el precio de los fármacos dispensados en España es mucho más barato que los que se destinan a la venta mayorista en el extranjero.

La Guardia Civil se percató del delito a través de un informe del servicio de famarcia aragonés donde se dectataron algunos riesgos de desavastecimiento. Poniendo en riesgo la salud de los pacientes que los necesitaban.