El animal fue encontrado en medio de una carretera del condado de Harris, Texas. Todo apunta a que había sido abandonado por sus dueños que al parecer le habían tapado los ojos con cinta adhesiva para que no les siguiera.
Así mismo, el pastor alemán presentaba varios signos de maltrato, tales como: un trauma en la cabeza y varios tumores por todo el cuerpo. Todo apunta a que lo habían abandonado para que este muriera, ya que además tenia el hocico sellado con cinta adhesiva.
El equipo de veterinarios de Houston SPCA le ha salvado la vida tras varios analgésicos que han conseguido aliviar su sufrimiento.