El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero ha presentado este miércoles su libro que ha titulado en línea con la que dice es su filosofía de vida: 'Crónica de la España que dialoga'. Rodeado de ministros del Gobierno, el socialista ha asegurado que la obra refleja aquello que siempre le ha funcionado en política: el diálogo, los pactos y el consenso. Por eso se ha mostrado muy crítico con la actitud del Partido Popular actual al mismo tiempo que ha defendido la amnistía. En el acto también se ha recordado la manera en la que vivió el fin de ETA como presidente del Gobierno que era en aquel entonces.

Se trata de un episodio de tensión máxima con víctimas en juego que el expolítico también narra en su nuevo libro. Y es que el número uno de la banda terrorista, que se encontraba en plenas negociaciones con el ministro del Interior de entonces, Alfredo Pérez Rubalcaba, llegó a pedir hablar de forma directa con el presidente Zapatero. En el caso de una respuesta negativa, prometió que haría explotar varias bombas al día siguiente, pero Zapatero decidió no ponerse al teléfono.

El socialista ha relatado que le llamó el ministro y le dijo que creían que debían "aguantar", a lo que el expresidente le dijo estar "de acuerdo". Aguantaron, pero, Zapatero ha confesado años después que ese "fue de los pocos días" que prácticamente no pegó ojo.

Otras cuestiones más actuales que ha entrado a valorar Zapatero durante el acto moderado por la periodista Ana Pastor ha sido el de la recién aprobada ley de amnistía, la cual ha considerado "va a sentar muy bien a España". En esa línea, ha hecho referencia al clima de crispación que impregna la política actual.

De forma contundente ha manifestado haber recibido "muchas críticas, hubo momentos duros, pero la intensidad, la ira, la agresividad, la desfachatez y el intento de deslegitimación que ha sufrido el presidente Sánchez lo ha superado". Cuestión por la que ha considerado que "esta etapa pasará como la que hubo una oposición mas deslegitimadora".

Adjetivo que ha llevado al expresidente a asegurar con total "tranquilidad después de conocer muchas democracias" que esta oposición "no ayuda en nada". En definitiva, y "como casi siempre pasa" Zapatero ha dicho "no hay un hecho trascendente en política que deje huella o abra una etapa y que no se tome con valentía, determinación y riesgo".