Primer mensaje de Susana Díaz a Pedro Sánchez: ya no es el protagonista. Ha dicho que "no es el momento de personalismos, sino del PSOE".
Un PSOE, que dice, hay que reconstruir, pero no como opina el exsecretario general, sino como funciona en Andalucía: "Un proyecto autónomo de la derecha y autónomo de Podemos. Ejemplo de ello es Andalucía, aquí la derecha está en la oposición y Podemos como tortolitos del PP".
Otro presidente autonómico, García Page, también critica los nuevos planteamientos de Sánchez y afirma que el PSOE nunca dudará de España.
Después de ver Salvados, no es el único opina que a Sánchez quedó en evidencia. Elena Valenciano ha afirmado que "él tampoco había dicho nunca que consideraba que el PSOE debía trabajar codo con codo con Podemos. Le hemos escuchado decir lo contrario".
Responde hasta 'El País', que argumenta que no presionó, sino que sólo dijo algo que era conocido, que un Gobierno con los independentistas no sería bueno. Después de oír a Sánchez, algunos dirigentes del partido piden calma: "antes de la acción, reflexión". Así lo ha dicho el valenciano Ximo Puig. Creen que hay pensar y mucho antes de ponerse a celebrar un Congreso.