Exhibiendo una imagen de cohesión, el PSOE ha aprobado sus nuevas reglas, que dan más poder a la Ejecutiva y a la militancia: "Un PSOE cercano a sus militantes, es un PSOE cercano a sus votantes" ha asegurado Pedro Sánchez.
Entre los líderes territoriales que en su momento fueron más críticos, ninguno está dispuesto a reabrir el debate interno: "Lo que no se entendería a estas alturas es que siguiéramos enzarzados en contradicciones internas" ha defendido García Page.
Unión pese a las ausencias destacadas: no han acudido cuatro presidentes autonómicos por problemas de agenda, dicen. Ximo Puig, Francina Armengol, Javier Fernández y la rival de Sánchez en primarias: Susana Díaz, que anoche sí le trasladaba su respaldo: "Cuando me necesite ahí me va a tener. Lo que quiero es que mi partido sea cuanto antes la alternativa de gobierno que España necesita".
Es la idea que ha vertebrado este Comité Federal, el segundo tras la reelección de Sánchez. La necesidad de acelerar un cambio ante un Gobierno que, ha dicho Sánchez, es un lastre para España, incapaz de presentar unos Presupuestos: "Un gobierno sin presupuestos es tan útil como un coche sin gasolina. No hay excusa, le exigimos que presenten el anteproyecto de ley".
Y si esta parálisis continúa, dice en El Mundo el secretario de organización del partido que Rajoy debería convocar elecciones. Un anticipo de las generales que ya deslizan sin tapujos los socialistas: "¿Se puede gobernar sin presupuestos? El PSOE tiene que estar ahí preparado, para darle respuesta" ha asegurado Juan Fernando López Aguilar. Decisión por la que de momento, nadie da un paso al frente.