El Ministerio del Interior ha nombrado jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil a José Manuel Santiago, el general que protagonizó la polémica sobre la lucha contra los bulos por parte de las autoridades.

Así lo recoge el Boletín Oficial del Estado (BOE) de este viernes, que informa de que el nombramiento se ha llevado a cabo a propuesta de la Directora General de la Guardia Civil y con la conformidad del Secretario de Estado de Seguridad.

En otro documento también se recoge su cese como segundo Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil para su posterior ascenso. Aunque el nombramiento se ha hecho oficial ahora, José Manuel Santiago ya ejercía las labores de primer jefe del Estado Mayor desde el pasado mes de noviembre, cuando José Luis Arranz pasó a formar parte de la reserva.

El pasado mes de abril, el general Santiago generó un gran revuelo tras señalar durante una rueda de prensa que el objetivo era "minimizar ese clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno" tras apuntar que el instituto armado estaba "trabajando para evitar el estrés social que producen esta serie de de bulos".

Esto llevó al Partido Popular a pedir su comparecencia, así como la de Fernando Grande-Marlaska y la de la directora general de la Guardia Civil. Entonces, Vox fue más allá y su presidente indicó que esto respondía al "inicio de un golpe de Estado".

Desde el Gobierno aseguraron que simplemente se trató de un "lapsus", mientras que desde la Guardia Civil emitieron un comunicado para indicar que su labor a detectar aquellos bulos y desinformaciones que generan un gran nivel de estrés y alarma social, especialmente en temas de salud.

Horas después de esta polémica, el general Santiago se refirió veladamente a su intervención para afirmar que "lo primero son las personas, no hay ideologías". "En mis 40 años de servicio, si hay una cosa que he aprendido es que lo primero son las personas, no hay ideologías. Todos los que estamos aquí, todos ustedes, somos un equipo".

Asimismo, en la misma rueda de prensa encontró la defensa de Fernando Simón, que indicó que estaban "al límite de sus fuerzas" y "trabajando con la mayor honestidad posible". "No es algo decente utilizar fallos en los discursos o en la terminología de las frases de personas que estamos al limite de nuestra capacidad para hacernos daño como equipo", sentenció.