Así lo ha anunciado el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, en una rueda de prensa en la Delegación de la Generalitat al término de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales Estado-Cataluña en la que también ha dicho que la Generalitat "no entra en el debate" de si tras este acuerdo los partidos independentistas apoyarían la tramitación de los presupuestos. "Es algo que tienen que decidir los grupos parlamentarios en el Congreso, no se ha planteado así por parte del Estado y esa es otra discusión" ha dicho.

También la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en una rueda de prensa posterior en sede ministerial se ha pronunciado sobre este asunto para desvincular totalmente el acuerdo, que salda casi 1.500 millones de deuda a Cataluña, con un supuesto respaldo a las cuentas públicas de 2019.

En su intervención ante los medios, el vicepresidente y conseller catalán también ha puesto de relevancia el contexto político en el que se ha celebrado la reunión y ha dejado clara "la discrepancia de fondo" del Govern con el Ejecutivo central "en todo lo que respecta al derecho de autodeterminación". Y ha pedido que se saque de los tribunales el conflicto político y se lleve a una mesa de negociación.

Ya en concreto sobre el acuerdo, Aragonès ha explicado que de los 1.459 millones de deuda que se ha acordado saldar, 700 millones se refieren al acumulado con los Mossos d'Esquadra y se transferirán en el ejercicio 2019-2022 y 759 millones corresponden a la disposición adicional tercera del Estatut relativos al déficit en inversiones en infraestructuras desde 2008, y también se aportarán en cuatro años.