La cúpula del PSOE mantiene el discurso, y asegura que Rajoy no será presidente gracias a ellos. "Ni apoyo ni abstención, no nos vamos a desdecir de lo que hemos anunciado durante toda la campaña", explica Antonio Hernando.
Un dirigente que se suma a esta opinión es Miquel Iceta, para quien "los votos de PSOE no pueden utilizarse para perdonar la corrupción del PP", por lo que cree que no puede abstenerse.
Pero hay una voz discrepante, la de Fernández Vara, que para evitar unas terceras elecciones cree que el partido debería pasar a la oposición y no impedir un Gobierno.
Entre esas dos aguas navega la presidenta andaluza, y es que Susana Díaz rechaza la lucha socialista por el gobierno afirmando que hay que irse a la oposición "para reconstruir el PSOE". Sin embargo, por ahora saca la pelota de la abstención del tejado del PSOE, recordando que "el encargado de hablar con todos los diputados es Rajoy".
Lo mismo hace el presidente valenciano, Ximo Puig, recordando que "si hay suficientes votos conservadores en el Congreso para conformar una mayoría, pues que lo intente". Cada uno tiene su opinión sobre cómo manejar la patata caliente de la abstención.