La vida de Daniel Galván sigue siendo una incógnita. En su declaración ante el juez, repitió que su nombre verdadero es Salahedin y que nació en Basora, Irak. Además comentó que había sido prisionero en la cárcel Abu Ghrai, prisión que fue tomada por Estados Unidos.
Ejerció en Irak como militar, pero al llegar a España se convirtió en administrativo de la Universidad de Murcia rompiendo de esta forma con su pasado. No sólo cambió de nacionalidad sino también de identidad, algo que la justicia solo contempla en casos excepcionales, como los testigos protegidos. Luis Rendueles, subdirector de la revista Interviú ha declarado: "Lo que parece que queda claro es que le consiguieron identidades nuevas, incluso llegó a tener tres pasaportes diferentes".
Su matrimonio con una mujer española, de la cual se divorció, le permitió obtener la nacionalidad española. Según los expertos podría tratarse de un matrimonio de conveniencia, un recurso habitual para hacer cambios de identidad. "Lo ha declarado en la Audiencia Nacional pero no ha dado el nombre de su esposa", ha aclarado Rendueles.
El propio Galván incluso presumió haber colaborado con el CNI y con la Guardia Civil, pero posiblemente no fuera más que un colaborador. El periodista ha comentado: "Estamos hablando de confidentes que siempre han estado en el filo, al otro lado de la ley".
El misterio más reciente que rodea a Galván es cómo se "coló" en la lista de los indultados y como consiguió un salvaconducto para abandonar Marruecos en menos de 24 horas. Pilar Cernuda ha comentado: " Los errores más graves siempre se producen por falta de atención, ocurre con mucha frecuencia que se confundan estas listas".
Demasiadas incógnitas para un hombre del que lo único que se conoce con certeza son sus delitos de pederastia.