La reunión del Congreso para decidir si pide mediar al TC para forzar el control al Gobierno se produce después de que el presidente en funciones, Mariano Rajoy, pidiera comparecer ante el pleno de la Cámara para informar del Consejo Europeo celebrado en Bruselas los días 17 y 18 de marzo en el que se cerró un acuerdo con Turquía sobre los refugiados que intentan llegar a territorio europeo.

La Mesa del Congreso verá la petición firmada por PSOE, Podemos-En Comú Podem-En Marea, Ciudadanos, ERC, DiL, PNV y el grupo Mixto de plantear un conflicto de competencia al TC "como consecuencia de la invasión de las atribuciones de la Cámara producida por la decisión del Gobierno de no someterse a la función de control de la acción del Gobierno".

Poco después, la Junta de Portavoces debe fijar también el orden del día del próximo pleno y los grupos tendrán que decidir si convocan una sesión de control al Gobierno, pese a que el Ejecutivo mantiene que estando en funciones no tiene obligación de someterse a la fiscalización de la Cámara.

En ese argumento redundó el secretario de Estado de Relaciones con Las Cortes, José Luis Ayllón, al señalar que Rajoy ha decidido comparecer de forma excepcional en una sesión informativa por la trascendencia del asunto debatido en Bruselas, pero que no ha habido cambio de criterio respecto a que el Ejecutivo en funciones no debe someterse al control de un Parlamento del que no tiene su confianza.

En las últimas semanas PSOE, Podemos y Ciudadanos han estado diseñando una estrategia común para forzar a Rajoy a comparecer, una vez que José Luis Ayllón trasladara al presidente del Congreso, Patxi López, la negativa del Gobierno a hacerlo.

En esa estrategia para forzar el control al Ejecutivo se incluye también la propuesta para que el TC aclare si considera que con su postura el Gobierno está negando las "atribuciones" de control que la Constitución otorga al Parlamento.