Pablo Casado ha reestructurado el Partido Popular un año después de ser elegido líder de la formación. "Es un nuevo PP, pero un PP orgulloso de lo que es, de los que han trabajado", ha afirmado.

Una remodelación que pasa por sendos cambios en las portavocías del Congreso y del Senado, que ahora ocuparán Cayetana Álvarez de Toledo y Javier Maroto, respectivamente.

Casado se ha rodeado de su círculo de confianza: Ana Beltrán será la sustituta de Maroto en la vicesecretaría de organización, Pablo Montesinos se encargará de la de comunicación y Cuca Gamarra, a pesar de que estuvo en algunas quinielas para abandonar la dirección nacional, será la vicesecretaria social.

Además de anunciar estos cambios, el presidente del PP ha lanzado un claro mensaje a Pedro Sánchez: no han cambiado de posición y no se van a abstener en su investidura. "El PSOE ya ha elegido a sus socios, aquí no tiene ninguna petición que formular", ha sentenciado.

Ante la puerta que abren algunos en su partido para encabezar su propia investidura, Casado ha respondido así: "¿Pedro Sánchez estaría dispuesto a abstenerse si yo encabezo una candidatura que pudiera obtener el respaldo de Ciudadanos? Se hizo célebre por el 'no es no' y no creo que el tiempo lo haya cambiado".

Casado ha aprovechado para reivindicar la centralidad del PP, asegurando que "2.700.000 electores del PP se han ido a Vox, muy de derechas no nos verán" y ha criticado que el PSOE vaya a gobernar en Navarra con la abstención de EH Bildu.