Tras la celebración de la diada el día 11, el Parlament acogerá desde 16 hasta el 19 el debate de política general, el más importante del año y en el que se aprobará la ley de Consultas. A partir de ahí, luz verde para que esa misma tarde, Artur Mas, firme el decreto de convocatoria del referéndum.
La pelota entonces pasa al tejado del Gobierno de Rajoy, que ya ha anunciado que recurrirá ante el Tribunal Constitucional la ley y la convocatoria. Tras el más que posible veto del Constitucional entraría juego el plan B de Artur Mas: la celebración de unas elecciones plebiscitarias donde los catalanes votarían a partidos claramente definidos a favor o en contra de la independencia.
CiU aspiraría a concurrir en una lista conjunta con ERC que no quiere pensar en un escenario alternativo a la consulta: "Es nuestro único plan" dice Alfred Bosch, diputado de ERC. Y por ello los socialistas podrían convertirse en la muleta. Este miércoles Pedro Sánchez se reunirá con Artur Mas en Palau de la Generalitat.