La elección de Pablo Iglesias por los quintos de Robledo de Chavela como el 'Judas de Robledo' no ha tardado en generar multitud de opiones en las redes sociales, en las que muchos usuarios están denunciando un delito de incitación al odio en la peculiar tradición de la localidad madrileña.

Cada domingo Santo, un muñeco es caracterizado como un personaje público, y los asistentes le lanzan piedras mientras está colgado en un poste, que también contiene varios cántaros con sorpresas. Actualmente, las sorpresas son caramelos tras las críticas de asociaciones animalistas, pero anteriormente había animales vivos, como palomas.

Otros personajes públicos como Iker Casillas o Iñaki Urdangarin también han sido protagonistas de esta celebración, aunque no habían levantado tanto revuelo como la utilización de la figura del líder de Podemos.

Los defensores de la tradición dicen que la incitación al odio que denuncian muchos internautas no existe, y esgrimen que en las fallas se queman figuras de personajes públicos. El debate está servido.