Tras el éxito incontestable de las protestas contra la ley de amnistía, en el Partido Popular no disimulan la sonrisa y se animan a esta petición. "Sánchez debería irse de este país en un maletero. No puede aspirar a seguir siendo presidente del Gobierno de España sin escuchar a la calle", ha indicado Miguel Tellado, vicepresidente de Organización del PP. Madrid, Santander, Málaga, Toledo, Alicante, Salamanca y otras muchas fueron sede de estas protestas.

En total, las distintas delegaciones del Gobierno cifran la participación en medio millón de personas. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha pedido no detenerse, parafraseando al expresidente del Gobierno José María Aznar cuando dijo aquello de el que pueda hacer que haga: "No sé qué podemos hacer, pero desde luego hagámoslo. No podemos dejar que minorías que odian España se salgan con la suya".

Por su parte, más movilizaciones y una denuncia ante el Tribunal Supremo contra Sánchez es lo que ha anunciado Vox este lunes. "Por la comisión de tres delitos solicitaremos la medida cautelar de la suspensión de la investidura", ha indicado el presidente de la formación ultraderechista, Santiago Abascal. Declaraciones aparte, el PSOE ha mostrado respeto a los manifestantes.

"Más cuando son manifestaciones que van por el cauce del respeto y de la tranquilidad", ha indicado la ministra de Educación, Pilar Alegría. Pero el PP quiere más, incluida la repetición electoral. "No nos callaremos hasta hablar en unas elecciones y que todos podamos votar otra vez", esgrimió este domingo el líder de la oposición en funciones, Alberto Núñez Feijóo. A ello han respondido los socialistas recordándole que ya hubo comicios en julio.

"Han sido hace poco y tienen unas causas: cada cuatro años, cuando el Gobierno pierde la confianza o cuando se produzca la disolución de las Cortes por parte del presidente del Gobierno", ha explicado el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, quien ha apuntado: eso no lo decide el líder de la oposición, en referencia directa a las reclamaciones de Feijóo en los últimos días.