La visita de Papá Noel a una residencia belga ha traído más disgustos que alegrías, después de que apenas unos días más tarde de su aparición se hayan detectado 75 casos de COVID-19 entre los residentes y trabajadores.

Según la televisión local VRT, en la residencia de Hemelrijck en Mol (Amberes) se han detectado 61 casos entre residentes y 14 en el personal de la residencia después de que un hijo de uno de los residentes se disfrazara de San Nicolás y los visitara. Apenas unos días más tarde presentó síntomas y se ha demostrado que es un caso de manual de "supercontagiador", al haber provocado el enorme brote en el hogar de ancianos.

Las autoridades municipales en Mol están apoyando a la residencia para poner la situación bajo control y el alcalde, Wim Caeyers, ha asegurado que fue "un error de juicio" organizar esta actividad navideña.

"Se hizo con la mejor intención, pero salió mal. Ha sido un día terrible para la residencia", ha declarado el edil.

"En un principio se dijo que se habían seguido las recomendaciones sanitarias, pero después recibimos fotos de las familias de residentes donde puedes ver que no es el caso", dijo el alcalde.