La desaparición de la pequeña Fiona, de cinco años, junto a las lágrimas de su madre, había conmocionado a toda Francia en mayo y hasta había provocado una fuerte movilización. Sin embargo, cuatro meses después, su madre ha admitido haber mentido y ha confesado que fue su pareja quien mató s su hija.
Una madre confiesa ser cómplice del asesinato de su hija cuatro meses después