Emmanuel Macron, el presidente de Francia, ha convocado para el lunes una reunión con los principales sindicatos y la patronal del país. El objetivo del encuentro es poder consultarles y presentar las medidas con las que pretende abordar la crisis de los 'chalecos amarillos'. A la cita, está previsto que además acudan los presidentes de la Asamblea Nacional y el Senado, así como responsables de asociaciones de municipios y regiones.

El encuentro precederá a una esperada intervención pública de Macron, que podría ser esa misma noche. El jefe de Estado francés no se ha pronunciado durante la semana, siendo su primer ministro, Édouard Philippe, quien ha afrontado en primera línea la gestión de las protestas de los 'chalecos amarillos'.

Philippe recibió el viernes por la noche a una delegación de una facción considerada moderada de ese movimiento, mientras la ministra francesa de Trabajo, Muriel Pénicaud, se reunió con la patronal y los sindicatos, salvo con la Confederación General del Trabajo (CGT), la segunda más importante del país, que boicoteo el evento.

El pasado domingo tuvo lugar la cuarta jornada de movilizaciones de los 'chalecos amarillos' que se saldaron con disturbios tanto en la capital como en otras ciudades del país. Por ello, repetidamente los políticos franceses han llamado a una pronta y rápida intervención por parte de Macron.

En este sentido, dentro de su propio Ejecutivo, el ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, antiguo barón socialista, ha mostrado este sábado su esperanza de que la intervención del jefe del Estado ataje la "deriva" de las últimas semanas, que le hace estar "inquieto" por las instituciones, y espera "un nuevo contrato social" con los franceses.