Salvini difundió una foto, hecha en Venecia, en la que aparece sonriendo e informando a sus seguidores de que se dispone a visitar "las zonas golpeadas por los corrimientos de tierra y el temporal", que ha afectado al país desde hace una semana.

La fotografía ha desatado de inmediato la indignación y algunos usuarios le han acusado de no tener piedad y le han recordado que lo que está ocurriendo en el país "es una tragedia, no una excursión".

Salvini respondió a estas críticas en una rueda de prensa en la región del Véneto, donde dijo que "no es un día para la polémica" y que está "orgulloso del trabajo que realiza el Gobierno", formado por su partido y el antisistema Movimiento 5 Estrellas.

Momentos después, el también vicepresidente del Gobierno de Italia compartió una segunda foto en las redes sociales, esta vez junto a un helicóptero del cuerpo de Bomberos.

"Si voy, me critican porque voy. Si no voy, me critican porque no voy. Si estoy triste, no está bien, si sonrío, no está bien. ¿Sabéis una cosa, queridos criticones, profesores y periodistas de izquierdas? No me importa, pienso en los italianos y sigo trabajando", escribió.

No es la primera vez que Salvini se ve envuelto en polémica por su exposición en las redes sociales: en la noche del 14 de agosto, horas después de que un puente se hundiera en Génova y causara 43 muertos, el líder de la Liga se fue de cena con miembros de su partido, tal y como se pudo ver en imágenes que compartieron los asistentes en Internet.

Las intensas lluvias y los fuertes vientos que azotan Italia desde hace una semana se han cobrado la vida de 29 personas, 12 de las cuales murieron en Sicilia. De estas 12 víctimas, nueve formaban parte de dos familias que estaban reunidas en una casa que se inundó tras desbordarse un río cercano.