El sábado 26 de agosto, Gabón celebraba elecciones presidenciales —y también municipales y legislativas—, de las que salió reelegido el actual presidente, Ali Bongo. La oposición denunció un "fraude orquestado" por el Partido Democrático Gabonés (PDG), al que pertenece Bongo, razón por la cual el Gobierno decidió cortar todo acceso a Internet para evitar "desinformación" y manipulación informativa. Pocos días después, un grupo de militares ha anunciado que el Ejército de Gabón ha tomado el poder, dando forma a un golpe de Estado en el país africano. El propio Bongo ha sido puesto bajo arresto domiciliario, bajo el control de los militares.

"Nuestro hermoso país, Gabón, siempre ha sido un remanso de paz. Hoy, este país atraviesa una grave crisis institucional, política, económica y social", ha señalado un grupo de unos doce militares en un mensaje difundido en el canal de televisión Gabón 24. Asimismo, el uniformado que leía el comunicado ha señalado que "hay que admitir que la organización de los plazos electorales, conocidos como elecciones generales del 26 de agosto de 2023, no reunía las condiciones para una votación transparente, creíble e inclusiva, tan esperada por los gaboneses y gaboneses".

También han denunciado que "a esto se suma una gobernanza irresponsable e impredecible, que se traduce en un continuo deterioro de la cohesión social, con el riesgo de llevar al país al caos". "Hoy, 30 de agosto de 2023, nosotros, las fuerzas de defensa y de seguridad, reunidos en el Comité para la Transición y la Restauración de las Instituciones (CTRI), en nombre del pueblo gabonés y garante de la protección de las instituciones, hemos decidido defender la paz poniendo fin al régimen vigente", han zanjado.

Los militares han enfatizado, asimismo, que "a tal efecto, se anulan las elecciones generales del 26 de agosto de 2023, así como los resultados truncados". Además, las fronteras del país "están cerradas hasta nuevo aviso" y "se disuelven todas las instituciones de la República, incluidos el Gobierno, el Senado, la Asamblea Nacional y el Tribunal Constitucional.

Los golpistas han hecho finalmente un "llamamiento a la calma y la serenidad al pueblo", y han reafirmado su "respeto de los compromisos de Gabón frente a la comunidad nacional e internacional". El mensaje se emitió después de que la Comisión Electoral Nacional Autónoma y Permanente (CENAP) informase de que Bongo, que lleva en el poder desde 2009, había ganado las elecciones presidenciales del pasado día 26 con el 64,27% de los votos, pese a las denuncias de fraude por parte de la oposición.

Ali Bongo, bajo arresto domiciliario

El presidente, Ali Bongo, ha sido puesto bajo arresto domiciliario, tal y como han confirmado los militares golpistas tras varias horas sin noticias sobre el paradero del mandatario después de la asonada protagonizada a primera hora del día, poco después de que la comisión electoral confirmara su reelección. "Ponemos en conocimiento de la comunidad nacional e internacional que Ali Bongo está bajo arresto domiciliario. Está junto a su familia y sus médicos", ha manifestado uno de los militares en un nuevo comunicado leído en la cadena de televisión pública Gabon 24, misma vía utilizada horas antes por los golpistas para anunciar la disolución de las autoridades y la toma del poder.

Asimismo, ha indicado que otras siete personas, entre ellas uno de los hijos del presidente, Nourredin Bongo, han sido arrestadas como sospechosas de alta traición contra las instituciones del Estado, desvío masivo de fondos públicos, malversación financiera internacional y banda organizada, falsificación de la firma del presidente, corrupción, tráfico de estupefacientes, entre otros cargos. "Se abrirá una investigación por parte de las autoridades competentes y los mencionados responderán por sus actos", ha dicho.

La oposición denuncia un "fraude orquestado"

Bongo, cuyo triunfo le otorga un tercer mandato de cinco años, se impuso al candidato de la principal coalición opositora Alternancia 2023, Albert Ondo Ossa, que quedó en segundo lugar con un 33,77% del escrutinio. Ossa había denunciado "un fraude orquestado" por parte del Partido Democrático Gabonés (PDG) del presidente Bongo en los comicios, que tuvieron lugar sin la presencia de observadores internacionales.

Las autoridades de Gabón cortaron la conexión a internet e impusieron un toque de queda tras la celebración este sábado de las elecciones, que fueron presidenciales, legislativas y municipales. Más de 846.800 gaboneses fueron llamados este sábado a las urnas para votar en una jornada que se caracterizó por los retrasos de hasta varias horas en la apertura de algunos colegios electorales.

En estos comicios a una sola vuelta, Bongo aspiraba a un tercer mandato de cinco años, tras haber ocupado el poder en 2009 después de la muerte de su padre, Omar Bongo, quien gobernó el país desde 1967. Esta votación acaeció bajo la sombra de las últimas elecciones presidenciales de 2016 (entonces los mandatos presidenciales eran de siete años), cuando Bongo venció al opositor Jean Ping por menos de 6.000 votos y la oposición denunció fraude electoral.

Las denuncias desataron una crisis postelectoral con protestas violentas duramente reprimidas, en las que los manifestantes llegaron a incendiar la Asamblea Nacional.

Aquellas elecciones también fueron cuestionadas a nivel internacional y la misión de observación de la Unión Europea, que este año no envió observadores a Gabón, percibió "anomalías" que cuestionaban el proceso y su resultado final. El anuncio de la toma de poder por los militares de Gabón ocurrió después del golpe de Estado cometido por el Ejército en Níger el pasado 26 de julio.

Níger se convirtió así en el cuarto país del oeste de África liderado por una junta militar, después de Mali, Guinea-Conakri y Burkina Faso, donde también hubo golpes de Estado entre 2020 y 2022.