Los refugiados que tratan de llegar a Europa no sólo lo hacen por mar. Muchos se ven obligados a meterse en camiones que transitan por los principales países de destino, con las consiguientes multas para sus conductores. Ante la falta de actuación de los Estados, algunos camioneros han decidido modificar sus rutas para no ser considerados cómplices de la inmigración ilegal.