La comisaria jefa de la Policía Metropolitana de Londres, Cressida Dick, ha presentado su dimisión este jueves tras salir a la luz en los últimos días casos de racismo, sexismo y homofobia entre sus agentes.

Tras reunirse con el alcalde de Londres, Sadiq Khan, Dick ha expresado en un comunicado que ya no cuenta con la "confianza" del edil laborista, que había aumentado la presión sobre ella en los últimos días y le exigía un plan creíble para cambiar la cultura interna del cuerpo. "No me ha dejado otra elección más que dar un paso a un lado", ha afirmado Dick, que ha acordado con Khan permanecer en el cargo "un corto periodo de tiempo" para asegurar la estabilidad de Scotland Yard.

En una declaración a los medios, el alcalde ha mantenido que "la única manera de comenzar a hacer frente a la escala de los cambios que son necesarios es tener un nuevo liderazgo en lo más alto de la Policía Metropolitana".

La dimisión de Dick llega después de que la Oficina Independiente para la Conducta de la Policía publicara una investigación que destapó "vergonzosos" mensajes de WhatsApp entre 14 agentes de la comisaría de Charing Cross, enviados entre 2016 y 2018, que revelaban diversos casos de acoso sexual y laboral, misoginia y discriminación.

A pesar de las disculpas de Scotland Yard, Khan ha cuestionado que nueve de los presuntos autores de esos mensajes continuaran trabajando en la Policía Metropolitana y que dos de ellos incluso hubieran sido ascendidos.

"Haber estado en este cargo para servir a los ciudadanos de Londres y el Reino Unido ha sido el mayor honor y privilegio de mi vida", ha expresado la comisaria jefa saliente, la primera mujer que ha dirigido el cuerpo y también la primera abiertamente homosexual.

Dick ha recalcado además que deja el cargo cuando en el cuerpo hay "más mujeres que nunca en todos los rangos y funciones" y "un número cada vez mayor de un amplio rango de orígenes étnicos que verdaderamente reflejan la diversidad de Londres".

Desde que asumió el cargo en 2017 y ya antes como alto mando, Dick ha estado en el centro de diversas polémicas, incluida su gestión de la operación que causó la muerte del brasileño Jean Charles de Menezes el 22 de julio de 2005, abatido por agentes que le confundieron con un terrorista. Numerosas voces ya pidieron su dimisión tras el secuestro y asesinato en marzo de 2021 por el policía Wayne Couzens, hoy condenado a cadena perpetua, de la joven Sarah Everard.