Qué mejor momento para usar norcoreanos como los malos de la película. 'Objetivo: La Casa Blanca' presenta a un grupo terroristas de ese país que secuestra al presidente de Estados Unidos. El protagonista, Gerard Butler, defiende que los malos de otro país no habrían tenido el mismo efecto. "Es muy cercana a nosotros, si hubieramos hecho una película sobre terroristas españoles a la gente no le hubiera importado una mierda".
Otra película que se acaba de estrenar, 'G.I. Joe: La venganza' presenta al mismísimo Kim Jong Un en una reunión con líderes mundiales en la que el amenazado es él.
Hollywood aprovecha y así mata dos pájaros de un tiro. Desde el 11S únicamente dos películas, 'El día de mañana' y '2012', se habían permitido destrozar uno de los emblemas del país, la Casa Blanca, y las dos por causas naturales. El trauma se rompe ahora de golpe y porrazo. Es atacada con bombas y disparos tanto en 'G.I. Joe' como en 'Objetivo: La Casa Blanca'.
Por si fuera poco, también en una tercera que aún no se ha estrenado: 'White House Down'. Parece que por fin los espectadores están preparados para ver enemigos destruyendo el hogar del presidente.