Tras revelar la cifra aproximada de inmigrantes llegados a Europa a través del mar Mediterráneo, ACNUR ha anticipado que 3.000 personas, entre inmigrantes y refugiados, llegarán a diario en las siguientes fechas a Serbia tras haber entrado en Europa por Grecia y haber atravesado Macedonia.
El organismo humanitario ha indicado que trabaja con las autoridades serbias para hacer frente a las necesidades de al menos 10.000 personas. A pesar del constante aumento del flujo de inmigrantes, la situación se ha calmado relativamente con respecto a las escenas de caos de este fin de semana en la frontera entre Grecia y Macedonia.
Han advertido de que gran parte de esos inmigrantes provienen de países en conflicto, como Siria o Afganistán, por lo que están "físicamente exhaustos y psicológicamente traumatizados, y requieren ayuda humanitaria y asistencia médica".
Preocupa, en particular, las condiciones de vida deplorables de mujeres, niños y ancianos. "Es vital que estas personas sean tratadas con humanidad... que se les preste ayuda esencial, pero también que se respeten plenamente su dignidad y derechos como refugiados, solicitantes de asilo o inmigrantes", ha declarado Fleming.
Ha indicado que es comprensible la preocupación de los países frente a tal flujo de personas, pero también les ha recordado sus obligaciones de respetar principios como el de reunificación familiar o dar protección a personas con necesidades específicas.
Mientras, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha confirmado que 2.373 inmigrantes han muerto en el Mediterráneo en el intento de alcanzar las costas europeas, con una gran mayoría que se dirigía hacia Italia.