Hoy se ha producido la detención de 25 presuntos ultraderechistas, 22 por su pertenencia a una organización terrorista cuyo objetivo era dar un golpe de Estado en Alemania y otros tres simpatizantes. Entre ellos se encuentra el príncipe Heinrich XII, un aristócrata y empresario del sector inmobiliario al que se conocía por difundir teorías conspirativas y antisemitas, que ha sido considerado por las autoridades como líder de este grupo cuyo plan incluía tomar el Parlamento alemán y matar si era necesario.

Otros de los arrestados en la mayor operación antiterrorista que se recuerda en el país, donde han participado 3.000 agentes en 11 estados diferentes, son exmiembros de las fuerzas armadas, así como una jueza y exdiputada de 'Alternativa para Alemania'. Precisamente, este partido de extrema derecha señala al Gobierno por no intervenir dinero de esta operación en vigilar centros de refugiados.

La inteligencia alemana calcula que este grupo, que sigue doctrinas conspiratorias de los llamados 'Ciudadanos del Reich' y de QAnon, cuenta con 2.000 seguidores de diversa naturaleza, desde un chef a una doctora, pasando por un tenor, y tiene como asesores a dos videntes. "Se han infiltrado profundamente en las policía federal, en las locales e, incluso, en el ejército alemán", explica Blas Moreno, analista de 'El Orden Mundial'.