Los principales sindicatos, CCOO y UGT, han salido esteprimero de mayo a la calle para pedir al Gobierno que continúe afrontando reformas, pero también para defender la democracia y la legitimidad de las instituciones de las campañas de acoso que sufren "los elegidos por el pueblo a través de las elecciones". Una manifestación a la que se han unido también miembros del Gobierno como las vicepresidentas María Jesús Montero, Yolanda Díaz y Teresa Ribera.

Bajo el lema "Por el pleno empleo: reducir jornada, mejorar salarios", los dos sindicatos han tenido presente esta jornada festiva la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de continuar al frente de sus funciones "con más fuerza si cabe", tras unos días de reflexión sobre si le merecía la pena continuar.

Un presidente que ya se ha manifestado en 'X', donde ha relatado una serie de datos por lo conseguido durante su mandato con los trabajadores: "Más de 21 millones de afiliados. Más de 10 millones de mujeres cotizando. Una subida del SMI del 54%. El paro juvenil, reduciéndose mes tras mes. Seguimos trabajando para recuperar la dignidad de los empleos, reducir la precariedad y ampliar los derechos de trabajadores y trabajadoras. Cada día más cerca de conseguir que esta sea la legislatura del pleno empleo. ¡Feliz #1DeMayo!".

CCOO y UGT han convocado más de 70 manifestaciones en todo el país, siendo la principal la de Madrid, liderada por los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, respectivamente, y que ha comenzado al inicio de la Gran Vía para terminar cerca de Plaza de España.

Para los sindicatos es necesario seguir con el programa de reformas y no quedarse "en la autocomplacencia de los datos de afiliación y crecimiento económico", con el objetivo de lograr el pleno empleo y la mejora de las condiciones laborales.

Reclaman mejoras en los servicios públicos de empleo para impulsar la formación y colocación de personas en paro -cuya tasa supera el 10 %-, así como reducir la jornada de trabajo, un cambio que negocian con el Gobierno, pero también individualmente con la patronal.

Y a la mayoría de ellas han acudido varios miembros socialistas, como ha sido el caso de Diana Morant en la de Valencia, donde ha defendido que este día también sirve para reivindicar a este Gobierno: "Es un día señalado para todas las personas progresistas que creemos en la lucha de los trabajadores, una lucha muy necesaria que no tiene que parar hasta que consigamos el objetivo de la plena ocupación y las condiciones laborales idóneas para todas las personas que trabajan en nuestro territorio".

"Hay cosas que celebrar, aún hay cosas que hacer, pero el camino es este. El camino es avanzar a pesar de todo, a pesar del barro, el ruido y a pesar de la política que quiere destruir. Nosotros seguiremos construyendo una realidad mejor", ha añadido la ministra de Ciencia.

Y en la manifestación principal, la de Madrid, las vicepresidentas María Jesús Montero y Yolanda Díaz se han alineado en sus discursos resaltando las intenciones del Gobierno de mejorar las condiciones de los trabajadores, comenzado con la reducción de la jornada laboral.

"Vamos a hacer de las manos de los agentes sociales mucho más. Y vamos a hacer algo que nos pide Europa, que es cumplir con la legalidad y vamos a reformar el despido. Vamos a proteger a la gente trabajadora y hacer algo clave, subir los salarios de nuestro país. Trabajadores y trabajadoras, el Gobierno de España está aquí para lo que estamos haciendo, mejorar la vida de la gente", ha asegurado Díaz antes del comienzo de la manifestación.

A su vez, Montero también ha destacado las intenciones del Gobierno de cuidar los derechos de los trabajadores, con especial hincapié en la jornada laboral: "Viva todo lo conseguido, pero sobre todo reivindicamos en la jornada de hoy que seamos capaces de avanzar en derecho de la mayoría social de este país apostando por el pleno empleo, por el empleo de las mujeres. La reducción de la jornada laboral es un clamor y la vamos a hacer posible. El incremento de los salarios y la cobertura de los derechos...".

No se cumple la ley

Cerca de la mitad de las horas extra que se trabajan no se pagan pese a las sanciones a las que se enfrentan las empresas

Hace cinco años que empezamos a fichar para controlar por ley las horas de trabajo. Sin embargo, parece que este sistema para controlar las horas extra no está funcionando, ya que en 2023 no nos pagaron 2,5 millones de horas, casi las mismas que antes de la ley actual.