El caso de Bankia es quizá, uno de los más sangrantes y el juez Ruz investiga ahora si en su salida a Bolsa se ocultó a 400.000 accionistas las pérdidas que generaba y, a pesar de los números rojos, sus directivos no se fueron con los bolsillos vacíos.
Rodrigo Rato se llevó una dudosa indemización y los de la CAM o Caixa de Penedés se embolsaron casi 24 millones a costa de la caja.
En el caso de NovacaixaGalicia, sus exdirectivos se embolsaron casi ocho millones de euros sin contárselo al Consejo de Administración, mientras el banco pedía a gritos un rescate.
Además, la Audiencia Nacional investiga estas entidades por expolio, administraciíon desleal o estafa, unos delitos que han costado a los ciudadanos españoles un rescate bancario de 40.000 millones.