En la temporada 2008 de Fórmula 1, en la que se produjo el 'crash gate' y Lewis Hamilton acabó siendo campeón del mundo, Bernie Ecclestone reconoce que no se tomó una buena decisión. Felipe Massa salió perjudicado y no se pudo proclamar campeón con su Ferrari.

Ahora, quince años después, el brasileño sigue sin renunciar a aquel título. Todo ello después de que Nelsinho Piquet denunciara que Renault "le tratara como a un perro" en una carrera que se acabó llevando Fernando Alonso.

Según ha informado 'Motorsport', Massa ha dado un paso más y sus abogados ya preparan una demanda para que la Fórmula 1 le dé ese campeonato.

A principios del mes de abril, el ex de Ferrari ya apuntó que iba a estudiar el caso y que se planteaba tomar acciones legales: "Se demostró que hubo un robo. En su momento, los abogados de Ferrari me hablaron de esa norma, acudimos a otros abogados y la respuesta fue que no se podía hacer nada...".

Pero esa situación ha cambiado después de las palabras de Ecclestone. Massa irá con todo para arrebatarle el título a Hamilton: "Saber que te robaron algo, que el resultado de esa carrera debía ser anulado y yo tendría un título. Al final, el mayor perdedor con ese resultado fui yo. Vamos más allá para entender todo esto...".

"Yo buscaría justicia. Creo que si te han castigado por algo que no ha sido culpa tuya, es producto de un robo, de una carrera robada, hay que hacer justicia. De hecho, lo correcto es anular el resultado de esa carrera...", dijo entonces Massa.

Ahora podría comenzar un proceso judicial en el que incluso Massa podría convertirse en campeón del mundo y Hamilton pasaría a tener seis títulos.