Andriy Shevchenko, exdelantero ucraniano, ha recordado cómo vivió la tragedia de Chernóbil cuando sólo tenía diez años. Él se divertía simplemente jugando al fútbol, pero un día todo cambió tras la explosión.

En una entrevista en el medio 'Corriere della Sera' en la que ha presentado su biografía, ha contado cómo fue su durísima infancia, alejado del lugar donde creció, a solo 200 kilómetros del lugar donde se produjo la explosión.

"Aún siento angustia, llegaron autobuses de la URSS y nos llevaron a todos los niños entre 6 y 15 años. Me vi a 1.500 kilómetros de casa y recuerdo vivirlo como si estuviese en una película", cuenta el ucraniano.

Asegura que el fútbol salvó su vida, en un momento muy complicado en esa sociedad: "En mi barrio empecé a tener cada vez menos. Murieron todos, no por radiación, sino por alcohol, drogas, problemas con armas... Las grietas en el muro de la URSS eran cada vez más grandes. El mundo que conocíamos se derrumbaba y mis amigos, como toda mi gente, ya no creían en nada y se perdieron. El amor de mis padres y el fútbol me salvaron".

En la escuela del Dynamo de Kiev dio sus primeros pasos en los campos de fútbol antes de convertirse en una estrella mundial: "Espero no sorprender a nadie si digo que todo me parecía normal. Yo tenía diez años. Me divertí como un loco jugando al fútbol en todas partes, me llevaron a la academia del Dynamo de Kiev, pero luego explotó el reactor 4 y nos llevaron a todos".