El 'caso Mbappé' dio un giro de 180 grados en apenas 10 días. Tras asumir en septiembre que debería permanecer un año más en el Parque de los Príncipes después de que el cuadro parisino rechazara una oferta final del Real Madrid de 200 millones de euros, todo parecía orquestado para que Kylian se vistiese de blanco nueve meses después.

Desde entonces, en el club presidido por Florentino Pérez han mantenido las líneas abiertas con el delantero en todo momento para, tras el 1 de enero, intensificar contactos y obtener la palabra del jugador.

Sin firma, pero con el sí de Mbappé a consumar su sueño de jugar en el Real Madrid, desde el Santiago Bernabéu confiaron en el jugador... que finalmente ha sucumbido a la presión del club y del gobierno francés y catarí.

Antes del último partido de Ligue 1 del PSG, celebrado este sábado, el conjunto galo comunicó la renovación del punta hasta 2025 y Kylian apareció en el verde del Parque de los Príncipes junto a Nasser Al-Khelaïfi y una camiseta que evidenciaba la prolongación de su contrato por tres temporadas más.

Pues bien, 48 horas después de anunciarse la decisión, Mbappé y el presidente del París Saint-Germain han comparecido en rueda de prensa para dar más detalles de la renovación y del 'no' final al Real Madrid.

"Me voy a limitar al fútbol, al juego, no tengo otras funciones. Es verdad que quería irme antes, pero ahora el contexto era diferente. No quería irme así de mi país, mi historia aquí no ha terminado, quiero ganar más aquí", ha arrancado el ariete.

"Había objetivos que había que cumplir, es una decisión complicada, siempre he querido refugiarme en el fútbol y no tenía problemas con la presión", ha añadido.

Sobre su decisión, Mbappé ha asegurado que estaba tomada antes del anuncio: "La tomé la semana pasada, pero no le dije nada a mis compañeros y el club quería que guardara silencio. Tengo mucho respeto por el Madrid y les agradezco todo su esfuerzo. He aprendido a mirar justo delante de mí, hoy firmo un nuevo contrato y espero que sea mi mejor elección. Es una nueva era y no sé qué pasará en el futuro. No sé que pasará en tres años".

"La tomé después de la llamada de Florentino, quería hablar con él antes. Si algo he aprendido en el fútbol es que no puedes mirar atrás. Solo en mi nuevo contrato y seguir hacia adelante. En el futuro no sé dónde estaré", ha añadido, dejando, incluso, la puerta abierta al Real Madrid.

Al-Khelaifi, por su parte, se ha mostrado pletórico con la continuidad de su jugador: "Es muy importante para Francia. Para el club, para la liga, para todos. Estamos conservando al mejor jugador del mundo. El ama ganar y esto es muy importante para nuestro proyecto".

"El dinero no ha sido lo más importante para Mbappé, sino el proyecto deportivo que tenemos", ha expresado el dirigente catarí del PSG, mientras que el jugador ha incidido en "dar las gracias al Real Madrid". "He tenido su camiseta desde que tenía 14 años. Pero me gustaría que entendieran que, como francés, he tomado la decisión de quedarme en Francia", ha señalado Kylian.

Mbappé, en la línea de su presidente, también ha asegurado que el dinero ha sido lo de menos en su decisión: "Hemos hablado del proyecto deportivo durante meses. De dinero, cinco minutos. Sabéis que el fútbol ha cambiado. Solo quiero llevar mi carrera de la mejor manera. No pido demasiado".

De esta manera se cierra un culebrón que arrancó en 2017 con la eclosión del francés en el Mónaco, que se ha postergado durante sus años en el PSG y que, cuando todo parecía que desembocaría con una inédita presentación en el Bernabéu, se ha zanjado con una renovación que aún cierra algún interrogante.