Mucho se ha venido hablando sobre qué podría pasar en el Clásico. Sobre cómo sería la llegada de ambos equipos en el Camp Nou y qué tenía preparado Tsunami Democratic en este Barcelona - Real Madrid. Tras los 90 minutos, el partido se pudo completar con total normalidad salvo un momento en el segundo acto, en el 56', en el que Hernández Hernández tuvo que detenerlo un par de minutos.

Y no fue porque hubiera invasión de campo. Nada. Nadie saltó al césped del Camp Nou. Tampoco por globos con pintura amarilla que cayesen al verde. Fue por lanzamiento de pelota de playa amarillas. No muchas. Unas pocas realmente, lo que obligó a detener el partido en el segundo acto. En ellas se podía leer además la frase 'Sit and talk', que es uno de los eslóganes de Tsunami Democratic.

Además, al comienzo del encuentro se exhibieron dos gigantescas pancartas amarillas en las que se podía leer 'Spain, sit and talk' y 'Freedom'. Antes de entrar al Camp Nou, muchos aficionados vieron cómo sus respectivas pancartas eran retiradas y tiradas a un contenedor, lo que provocó que Tsunami Democratic hablase de "censura" en redes y criticase a Josep María Bartomeu. Y también al Barcelona.

Al final del Clásico, Tsunami Democratic ha reconocido que no ha podido llevar a cabo el plan que tenían en mente en el partido. "No hemos podido llevar a cabo nuestra gran acción por la actuación policial. Había varias fases, la primera, el foco mediático, sí hemos podido realizarla", dijeron en redes.

En el minuto 17, el Camp Nou cantó como es costumbre '¡Independencia!', algo que sucede en todos los partidos que el Barcelona juega en su domicilio.

Salvo eso, Tsunami Democratic, como posteriormente confirmó, no influyó en nada en el partido que enfrentó al Barcelona y al Real Madrid. Ambos pudieron jugar con total normalidad un Clásico que terminó como comenzó, con un 0-0 que deja todo como estaba... pero con los blancos sacando un punto del siempre complicado Camp Nou.