La inesperada muerte de Mota, director creativo de Pronovias, a los 46 años ha conmocionado el mundo de la moda, y en este sentido numerosos representantes del sector han destacado tanto su capacidad de trabajo y de innovación, así como su calidad humana.

El cuerpo de Mota fue hallado en la tarde del pasado martes en los lavabos de un ambulatorio de Sitges (Barcelona) en donde se habría encerrado y quitado la vida tras escribir tres notas dirigidas a sus familiares y a la policía, según han informado algunos medios, en tanto que fuentes próximas a la familia pidieron "respeto por su dolor".

Los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación inicial a raíz del hallazgo del cadáver de Mota y confirmaron que no había indicios de criminalidad en la muerte del diseñador.

Nacido el 9 de julio de 1966 en Tarragona, pero residente en Barcelona, ciudad por la que sentía pasión,  Mota se decantó por el el diseño frente a la arquitectura, otra de sus pasiones, a causa del "delicioso vestuario" que vio en la película "My fair lady", protagonizada por Audrey Hepburn, y que le cambió la vida.

En 1990 y tras estudiar diseño textil en IADE (Institución Artística de Enseñanza) de Madrid, tuvo la oportunidad de empezar a trabajar en el Grupo Pronovias, en el que llevaba 23 años como director creativo.

Mota había dado un giro al diseño de la moda nupcial y había apostado por creaciones más vanguardistas en cada una de sus líneas, desde las más clásicas a las más modernas, con diseños enfocados siempre a realzar la belleza femenina y que favorecieran al máximo a cada tipo de mujer.