El Aston Martin Lagonda All-Terrain muestra un excéntrico futuro para los SUV eléctricos

Hace un año, Aston Martin presentaba precisamente sobre el mismo escenario del Salón de Ginebra su versión Conceptual del Lagonda Sedán, lo que en teoría iba a ser el primer vehículo eléctrico de gran lujo de la firma británica. En aquel momento, junto a los primeros renders virtuales del automóvil se anunció que además contaría con una variante SUV que justo 12 meses más tarde se ha dado a conocer con el nombre de Aston Martin Lagonda All-Terrain.

No le ha asustado a la firma alada presentarlo junto al Aston Martin AM-RB 003 y el Vanquish Vision Concept. No dejan de ser tres vehículos orientados a un público objetivo completamente distinto. Este crossover de tracción total alimentado por baterías pretende ser el producto perfecto para mercados en los que los SUV de alta gama han desembarcado para quedarse, especialmente en los Emiratos y en regiones en las que hasta ahora el petróleo ha sido la gran fuente de negocios.

Bajo la pluma del director creativo y jefe de diseño del estudio de Aston Martin Lagonda, Marek Reichman, nos encontramos con una versión conceptual que debe anticipar la llegada de un SUV eléctrico con capacidades autónomas para el año 2022, en este caso luciendo una estética marcada por la suavidad de sus líneas laterales que recuerdan inevitablemente a la versión sedán, protecciones inferiores plásticas que le dotan de esa imagen off-road que muchos buscan y unas grandes llantas que enfatizan esa percepción de gran distancia libre respecto al suelo que se le quiere dar a este Aston Martin Lagonda All-Terrain.

Según el fabricante, estamos frente a "un vehículo ultra elegante, sumamente lujoso, totalmente eléctrico, sin emisiones contaminantes y que puede transportar a sus ocupantes a lugares remotos y espectaculares". Lo cierto es que la posibilidad de situar la batería en el suelo del habitáculo le permite no solo bajar el centro de gravedad lo máximo posible en un vehículo tan alto, sino que también lo dota de una gran habitabilidad, marcada especialmente por un diseño diáfano gracias a las grandes dimensiones de su parabrisas y a la ausencia de una configuración tradicional con pilar B.

Si la imagen exterior futurista inspirada en los súper-yates es impactante, lo verdaderamente revolucionario nos lo encontramos en el interior. Al igual que Lagonda Vision Concept de 2018, la fila delantera de asientos se puede girar para crear una especia de sala de estar mientras el vehículo se encuentra circulando en modo autónomo, aunque también existe la posibilidad de adelantar la segunda fila para dejar espacio a la tercera línea de asientos. Además de un salpicadero con formas muy limpias y sin botones, nos encontramos que en la consola central hay una especie de ventilador que ha sido creado específicamente para situar la llave, la cual queda flotando gracias a los electroimanes.

¿Hay más? Sí, porque obviamente al ser una versión conceptual hay espacio para soluciones exóticas y que seguramente se puedan quedar por el camino hacia la producción, sin embargo, lo que sí parece plausible es que el Lagonda All-Terrain pueda utilizar materiales poco habituales para el habitáculo como el cachemir, los cristales de Swaroski de la llave o las sedas de los paneles de las puertas… Todos ellos son materiales propios de Gales, país en el que se espera que se inicie la producción de la versión definitiva.