WINTER IS COMING
4 consejos para preparar tu coche para el frío y el invierno
Así puedes encargarte de que tu coche esté 100% preparado para el invierno y los climas extremos que pueden llegar.
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El invierno está a la vuelta de la esquina y, aunque puede regalarnos paisajes increíbles y días acogedores, también trae consigo desafíos para quienes conducimos. Las bajas temperaturas, la lluvia intensa e incluso el hielo o la nieve pueden poner a prueba nuestro coche. La reciente DANA nos recordó que la naturaleza tiene un poder inmenso y que estar preparados es clave para enfrentarnos a imprevistos. Sin ir más lejos, Filomena puso en peligro a muchos conductores por el efecto que tuvo en las carreteras del país. Por eso, aquí tienes cuatro consejos sencillos para que tu coche esté listo para todo lo que el invierno le lance.
1. Revisa el sistema de calefacción y la batería
La calefacción no solo mantiene el coche cómodo, también es crucial para desempañar los cristales y garantizar una buena visibilidad. Además, el frío es uno de los peores enemigos de las baterías, que pierden eficacia cuando las temperaturas bajan.
¿Qué puedes hacer?
- Calefacción: Prueba la calefacción antes de que haga frío extremo. Si notas que no calienta lo suficiente o sale aire extraño, podría haber un problema en el sistema. Mejor solucionarlo antes de que sea urgente.
- Batería: Revisa la carga y los bornes. Un taller puede ayudarte con un chequeo rápido. Si tu batería tiene más de 3 años, considera cambiarla antes de que te deje tirado en la carretera.
Equipamiento que puede ayudarte
- Rasquetas para limpieza del parabrisas
- Calefactores para el parabrisas con toma de mechero
- Arrancadores con batería externa
- Manta térmica para situaciones de emergencia
No es solo una cuestión de comodidad. Si planeas madrugar para ir en coche a trabajar y la calefacción no funciona bien, podría tener problemas de visibilidad, tener un accidente y quedarte tirado. Sin calefacción, además, la situación podría volverse extrema y poner en peligro tu vida.
2. Cuida tus neumáticos: tu seguridad depende de ellos
En invierno, el asfalto puede volverse más resbaladizo por la lluvia, el hielo o la nieve. De hecho, es seguro que esto ocurrirá. Unos neumáticos en mal estado aumentan el riesgo de perder el control del coche.
¿Qué puedes hacer?
- Neumáticos de invierno: Si vives en una zona con nevadas frecuentes o mucho hielo, estos neumáticos ofrecen una tracción superior. En su defecto, asegúrate de tener cadenas a mano y saber cómo colocarlas.
- Presión y desgaste: Las bajas temperaturas reducen la presión de los neumáticos. Revísala regularmente y asegúrate de que el dibujo tiene al menos 1,6 mm de profundidad (el mínimo legal en España).
- Previsión: Estar preparando y ser consciente de que el firme está resbaladizo puede hacer que cuando pierdas tracción no reacciones de forma inadecuada. También te ayudará a ajustar la velocidad a las circunstancias.
Equipamiento que puede ayudarte
- Cadenas metálicas o textiles
- Spray de cadenas líquidas
- Compresor de aire con batería
3. Comprueba los líquidos del coche: anticongelante y limpiaparabrisas
El motor y la visibilidad son fundamentales, y en invierno sufren más. El anticongelante protege el motor de temperaturas extremas, y el líquido limpiaparabrisas evita que te quedes sin visibilidad en el peor momento.
¿Qué puedes hacer?
- Anticongelante: Asegúrate de que el nivel es el adecuado y que el líquido está en buen estado. Si no lo has cambiado en años, es momento de hacerlo. También debes revisar que no lleves un simple refrigerante. Para verano puede ser suficiente, pero en invierno debes contar con un anticongelante que resista las temperaturas extremas de tu zona.
- Líquido limpiaparabrisas: Usa uno específico para bajas temperaturas, que no se congele en el depósito ni en las boquillas. Además, revisa que las escobillas del limpiaparabrisas no estén desgastadas.
4. Prepara un kit de emergencia: por si acaso
Aunque no esperamos que algo malo ocurra, siempre es mejor estar preparado. Un kit de emergencia puede ser la diferencia entre un mal rato y una situación peligrosa.
¿Qué incluir?
- Básicos: Linterna, manta térmica, guantes, rascador de hielo y botellas de agua.
- Para el coche: Cables de arranque, un kit de herramientas sencillo y un cargador portátil para el móvil. Es posible añadir también un arrancador con batería.
- Extras útiles: Descarga aplicaciones de mapas offline y consulta el tiempo antes de salir. Un móvil viejo con la batería al máximo puede salvarte la vida. La luz V16 puede ser una buena forma de llamar la atención cuando es de noche o cuando el coche se ha quedado atascado en una zona de baja visibilidad.
Preparar tu coche para el frío y el invierno no solo protege tu vehículo, también te da tranquilidad. Con estos cuatro consejos, te asegurarás de que nada, ni siquiera las inclemencias del tiempo, interrumpan tus planes. Recuerda: la naturaleza es poderosa, pero con un poco de preparación podemos protegernos nosotros y a nuestro coche de los peligros de las temperaturas extremas.
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