Viajestic» Escapadas

Una nueva joya en Alcalá la Real en la provincia de Jaén

Una ciudad oculta bajo la Fortaleza de la Mota

La espectacular imagen de la Fortaleza de la Mota, da cuenta de su importancia histórica, de su gran valor estratégico, y de su importancia en el paso del medievo a la edad moderna. Es uno de los perímetros amurallados más extensos de toda Andalucía.

Publicidad

En el cerro de la Mota, imponente, a 1.029 metros sobre el nivel del mar, en la ciudad de Alcalá la Real, esta fortaleza nazarí que data de los siglos XIII y XIV, marcó durante más de 150 años la frontera entre los reinos de Granada y Castilla. La Fortaleza de la Mota, de carácter defensivo, contaba con varios anillos amurallados, siete puertas, tres torres, la Torre del Homenaje, la Torre de la Campana o de la Vela y la Torre Mocha, la alcazaba y la Iglesia Mayor Abacial, en lo que es uno de los perímetros amurallados más extensos de toda Andalucía.

La espectacular imagen de la Fortaleza de la Mota, recortada por el limpio cielo de la provincia de Jaén, da cuenta de su importancia histórica, de su gran valor estratégico y de su importancia en el paso del medievo a la edad moderna. Este conjunto monumental era una perfecta atalaya natural, que dominaba el paisaje en varios kilómetros a la redonda. Testigo de los avatares de la historia, tuvo gran importancia tras la invasión musulmana, además de servir como llave, guarda y defensa de los reinos de Castilla. Un puente entre ambos reinos.

Declarado Bien de Interés Turístico, dentro del conjunto monumental de la Fortaleza de la Mota existen varios espacios donde se explica el concepto de frontera, los modos de vida de sus habitantes, los distintos espacios y la articulación de la Fortaleza con el territorio. Hay que seguir con el Museo-Palacio Abacial, en la céntrica calle Carrera de las Mercedes, para conocer el patrimonio y los vestigios del pasado de la emblemática ciudad de Alcalá la Real, destacando el “Tesorillo” y una escultura romana de Hércules, así como restos de tumbas prehistóricas.

Pero hay más, porque ahora también la fortaleza muestra una nueva joya al visitante, las galerías subterráneas, una auténtica ciudad oculta, recuperada para el gran público. Estas galerías tuvieron una importancia capital en la conquista de la ciudad fortificada en el siglo XIV de Alcalá de Benzayde. Las Galerías de esta Ciudad Oculta, se construyeron durante el Medievo y permitían las comunicaciones, el abastecimiento y la defensa de la fortaleza, además de ser una vía de salida en caso de huída.

La visita es realmente impresionante y recorre tres tramos. El Tramo inferior va desde el arrabal de Santo Domingo y atraviesa la muralla hasta llegar a la zona de entrepuertas, junto a la Puerta de las Lanzas. El Tramo intermedio, el más largo, presenta dos fases en su construcción, una que discurre hacia el pozo, ascendiendo ligeramente y otra que asciende hacia la parte alta del cerro desde la torre del pozo. Y por último el Tramo superior se adentra en la roca bajo la Torre del Homenaje y que asciende de forma vertiginosa hasta llegar a la base de la misma, saliendo al exterior en la antemuralla junto al acceso a la Alcazaba.

El tramo de las Galerías que se abre al público tiene un recorrido de 120 metros y un desnivel de 40 metros. Su existencia, al margen de las referencias documentales, se conoce desde los años 70 del siglo pasado. Y ahora, por fin, se pueden ver gracias al trabajo de rehabilitación realizado. La entrada a la Ciudad Oculta está entre las murallas y puertas, cerca del Arrabal viejo, una red de pasadizos y pozos de agua, que fueron fundamentales en épocas de asedio.

La Fortaleza de la Mota abre al público en invierno de 10h a 17h 30 de lunes a domingo y los sábados hasta las 18h. Y en verano todos los días de 10h 30 a 19h 30. El pasadizo de la Ciudad Oculta en invierno los sábados de 12h 45 a 17h y los domingos y festivos a las  12h 45. Y en verano, los sábados hasta las 18h 30.

Si todavía no conoces esta histórica ciudad, planea una escapada para conocer la ciudad fortificada. Y no dejes de pasear por el mágico barrio de las Cruces, un rincón de gran belleza con sus calles estrechas y empinadas. Hay también varias ermitas y miradores para contemplar la ciudad y su Fortaleza. Imprescindible la plaza del Ayuntamiento con edificios del siglo XVIII como la Casa Consistorial o las Casas de Enfrente.

Si eres un amante de la historia y quieres ser el primero en conocer la impresionante Ciudad Oculta bajo la Fortaleza de la Mota, reserva ya un fin de semana en tu agenda.

Publicidad