Así se carga la batería de un iPhone con caca de vaca

En Trenton (Florida) 11.000 vacas repartidas en más de 2.400 hectáreas se encargan día a día de producir miles de litros de leche, pero también cientos de vatios de energía a través de sus excrementos.

Esta explotación ganadera genera el 70% de la energía que consume, por lo que sus empleados son, literalmente, capaces de cargar sus iPhone gracias a las cacas de las vacas que viven allí.

Para llegar hasta ese punto, los excrementos primero tienen que pasar por una gran laguna en la que se almacenan durante 21 días. Durante ese tiempo, una máquina de procesado instalada debajo del suelo se encarga de aplicar calor a toda la mezcla, de tal manera que comienza a desprender el gas metano que producen los cientos de litros de excrementos almacenados.

Este gas metano es captado por unos tubos que lo llevan hasta un generador de 1.000 kilovatios, que es el que finalmente transforma esa energía en corriente eléctrica para que pueda ser usada dentro de la explotación ganadera. En total, pueden dar energía a 425 casas si se lo propusieran, y se ahorran más de un millón de dólares al año.

De manera adicional, también reutilizan el agua con el que van acompañados los excrementos para regar las plantaciones de hierba cercanas, que son las que utilizan para que las vacas pasten.

Este sistema utilizado por esta explotación ganadera ha sido premiado ya varias veces desde 2005 reconociendo su sostenibilidad y la eficiencia que les ha llevado además a poder vender parte de la energía que producen para ser así más rentables.

Así que, ya sabes, si estás en mitad del campo y no tienes dónde cargar tu iPhone, deja de mirar a las vacas como un elemento decorativo más y piensa que, gracias a ella, podrías mandar una foto de la vaca por tu WhatsApp.