MISIÓN DESCONOCIDO
SpaceX se prepara para el lanzamiento del Boeing X-37B, el avión espacial ultrasecreto de Estados Unidos
Después de retrasar su lanzamiento previsto para la mañana de este pasado lunes, el Boeing X-37B despegará esta misma noche.
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Después de permanecer en tierra durante más de un año, Estados Unidos ha anunciado el lanzamiento de su avión ultrasecreto desarrollado por Boeing y la NASA.
El despegue estaba programado en un principio para este pasado lunes (después de suspenderse el lanzamiento programado para el domingo por el clima). Sin embargo, la compañía informó esa misma noche que había retrasado el lanzamiento "debido a un asunto en tierra", lo que indica un problema con la plataforma de lanzamiento del cohete o los sistemas de combustible, según una publicación de SpaceX en redes sociales. Finalmente y si no vuelve a surgir ningún otro contratiempo, se lanzará esta misma noche a las 20:14, hora de Miami.
El X-37B efectuará su séptima misión con miras a romper una nueva marca. La particularidad es que ahora lo hará impulsado por un cohete de SpaceX. En concreto, un cohete Falcon Heavy de SpaceX despegará del complejo 39 A con miras a poner el vehículo en órbita.
Misiones secretas
Lo cierto es que muchas de las misteriosas tareas del X-37B han sido clasificadas, pero la Fuerza Espacial de Estados Unidos proporcionó algunos detalles sobre los objetivos de esta misión no tripulada.
La Misión X-37B 7, también conocida como OTV-7, ampliará el conocimiento de la Fuerza Espacial de Estados Unidos sobre el entorno espacial experimentando con futuras tecnologías de concienciación del dominio espacial. Estas pruebas son fundamentales para garantizar operaciones seguras y estables en el espacio para todos los usuarios del dominio.
Entre las investigaciones a bordo habrá un experimento de la NASA que tiene como objetivo encontrar formas de sostener a los astronautas en futuras misiones al espacio profundo.
Los experimentos también "incluyen operar el avión espacial reutilizable en nuevos regímenes orbitales, experimentar con futuras tecnologías de concienciación del dominio espacial e investigar los efectos de la radiación en los materiales proporcionados por la NASA", según la Fuerza Espacial de Estados Unidos.
El vuelo anterior del programa registró una cantidad sin precedentes de 908 días en el espacio, lo que demuestra la resistencia y las capacidades tecnológicas del X-37B.
Mientras Falcon Heavy impulsa el X-37B a órbita, la misión subraya la sinergia de la tecnología avanzada de cohetes y la exploración espacial militar de vanguardia.
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