Echando la vista atrás, laSexta Columna analiza el ejemplo feminista de folclóricas de nuestro país como Rocío Jurado. Sus letras ayudaban a empoderar a la mujer y llegaban a hablar, incluso, de romper matrimonios.

"En mis canciones canto cosas como 'si tú no me quieres, tengo a otro que ya me quiere, me voy y adiós muy buenas'", aseguraba la más grande en una entrevista en televisión en 1991.

Rocío Jurado incluso se permitió cantar metafóricamente a la masturbación. "Amores humanos, amores a solas, qué bello mi cuerpo, qué bellas las olas. Qué forma más simple y antigua de amar", afirmaba con rotundidad en uno de sus temas.

Paula Iglesias, cuya bisabuela votó en las elecciones de 1933, destaca al respecto que "tuvo que ser muy fuerte hablar de esto en una canción en aquel momento". Algo a lo que su abuela, Concha Bueno, responde claramente: "Le importaba tres narices".

Era una canción sobre un asunto, el sexo, del que todavía es difícil hablar para muchas mujeres. "Yo nunca lo voy a comentar en una cafetería y no me parece de educación estar hablando de sexo en un sitio así", defiende Bueno.

Por su parte, su nieta reconoce que sí lo hace: "Es como hablar del cocido que ha hecho mi madre". "Aquí nos damos cuenta de la evolución", apostilla su abuela.