El nuevo proyecto de Mensajeros por la Paz, la organización solidaria del padre Ángel, consiste en dar trabajo a entre 11 y 20 personas sin hogar.

Bajo una alianza con una empresa de patinetes, los nuevos empleados se encargarán de localizar, recargar y recolocar los patinetes eléctricos.

"Hay que mantener los pies en el patinete y la mirada en el cielo. Me hizo ilusión poder bendecirlos", cuenta el padre Ángel después de haber montado en uno de ellos y de haberlos bendecido.

Cree que "la mayor dignidad que podemos tener es que el pan que comemos venga del trabajo", por eso alaba la actitud de muchos ciudadanos y empresas que se prestan a este tipo de iniciativas.

Sobre la exhumación de Franco

Además de comentar el nuevo proyecto de los patinetes, el padre Ángel se ha pronunciado sobre la exhumación de Franco y sobre las declaraciones de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, que se ha manifestado contra la Ley de Memoria Histórica con la siguiente pregunta: "¿Y lo siguiente? ¿Arderán parroquias como en el 36?"

"En España el gobierno no persigue a la iglesia", asegura el religioso. "Tenemos toda la libertad y ya las iglesias no se queman. A veces hay que ver más bien el vaso medio lleno que medio vacío como ven los políticos en sus sesiones plenarias", apunta.

Respecto a la exhumación de Franco, cree que la solución es "bastante pacífica" y que "lo importante es que haya paz y no guerra por los muertos". Y añade: "Fuera quien fuera, se debe enterrar con toda la dignidad".

Preguntado por el juicio contra las manifestantes de la procesión del 'Coño Insumiso', donde Abogados Cristianos ejerce de acusación particular, el padre Ángel argumenta que "no ofende quien quiere, sino quien puede". "Las manifestaciones pueden ser más o menos oportunas pero no es para poner las manos en la cabeza", explica. "Hay que saber respetar a los que lo hacen y a los que creen que no está bien".

Por último, y a consecuencia de esta precampaña electoral en la que ya se sitúan los partidos políticos, el padre Ángel asegura que se presentaría a las elecciones. Eso sí, puntualiza: "Si me hicieran caso y pudiera hacer algo, claro que me presentaría".

Aunque acaba por reconocer que "no hay profesión más bonita que la de ser cura y tener la libertad que yo he tenido siempre de poder hablar de dios y de Jesús de Nazaret. Prefiero seguir siendo cura que ser político que no sé cómo podría acabar".