La periodista Inés Paz ha entrevistado en Liarla Pardo a un agente de la BRIMO, la Brigada Móvil de los Mossos d'Esquadra, que ha trabajado como miembro de las fuerzas de seguridad para frenar la serie de altercados que se han registrado en Cataluña desde que se diera a conocer la sentencia del procés; un trabajo que ha sido, como poco, complicado.

"Mi cuerpo está dolorido. Tengo dolores de espalda, heridas, pero no me prohíben continuar", cuenta el agente, que ha añadido: "Lo que hemos vivido hasta ahora nos ha superado con creces". Ha afirmado que tanto él como sus compañeros están "agotados", y ha explicado la razón: "Son muchos días, y esto no ha acabado ahora. Seguirá, y como no sabes el fin, no te puedes relajar. Llevamos así casi un mes, de 15 a 16 horas diarias".

No obstante, lo peor, según ha continuado el mosso relatando a la periodista, no es el desgaste físico. "He temido por mi vida. Ha habido momentos en los que no sabía cómo iba a salir de ahí, y gracias a otros compañeros, y el apoyo entre nosotros, hemos conseguido salir". Para el agente, el episodio del Aeropuerto de El Prat fue uno de los más difíciles: "Nos superaba la masa, y nos tiraban de todo: carritos de maleta, extintores, vallas, botellas... Nos faltaba el edificio entero".

Sobre los responsables de los altercados ha afirmado: "Si pueden ver un policía herido, lo celebran". Se ha referido, en este caso, a todos los disturbios que tuvieron lugar en las calles de Barcelona que se saldaron con numerosos agentes heridos por la situación: "Todo era escombros, llamas, lanzamientos y barreras de fuego, no veías lo que había detrás. Era como salir de las puertas del infierno hacia una masa que quería acabar contigo".

El mosso ha afirmado que se planteado dejar su trabajo: "No porque crea que está bien o mal, sino porque lo importante es la familia. Hemos superado limites así, pero nunca con esta cantidad de días, de violencia. Lo superaremos y seguiremos adelante, pero esto deja huella". Ser policía no es ser un robot, o ser indestructible. O no poder morir. El miembro de la BRIMO ha recordado que ser policía no significa "ser un robot": "Eres humano, sangras igual que ellos. Tienes corazón, familia, hijos que te esperan".

Así se viven los disturbios de Cataluña siendo un mosso: "Piensas que quizá la próxima pedrada te tire al suelo, sea definitivo"

En otra parte de la entrevista, el mosso ha valorado positivamente la coordinación con la Policía Nacional y ha opinado sobre el futuro del procés tras los graves altercados que se han vivido en Cataluña tras la sentencia del procés: cree que "los políticos tienen que resolver este conflicto, no alentarlo", porque "con la violencia no se acabará". Aquí puedes ver la entrevista.