Óscar tiene 40 años y ha vuelto a casa de sus padres con sus dos hijos. Asegura que ha tratado de dar con un alquiler "más económico", una tarea que le ha resultado imposible: "Al final, determinamos que para poder tener para comer, teníamos que volver a casa de mi madre. Hablamos con ella, y ahí estamos", explica en La Roca.

El hombre duerme en el comedor de la vivienda. Tiene un trabajo estable, pero asegura que no puede pagar un alquiler: "Vivienda no hay (suficiente) para la demanda que hay en el mercado". "La que hay no se está facilitando; hay vivienda vacía", expone.

"Siento que estoy retrocediendo", lamenta, como puede observarse en el vídeo situado sobre estas líneas. Además, Óscar se encarga de los cuidados de su madre "porque tiene un grado tres de dependencia".