Los ladrones de coches se frotan las manos ante las ventas de vehículos, que son el mejor botín. La Policía no da abasto y, por ello, ya cuentan con otros ojos, las cámaras que tienen en sus coches. "Tenemos cámaras que permiten ir captando y el propio sistema del coche nos dice si tiene algún tipo de interés policial, si está sustraída la placa, la documentación, tiene orden de precinto, embargo...", señaló a Equipo de Investigación Esteban Alonso, cabo de la Policía Local de Madrid.

En Madrid, se produce un robo cada hora y media. Sin embargo, el sistema de la Policía permite leer más de 1.500 matrículas al día. Alonso explica cómo funciona: "Capta todo lo que encuentra de día y de noche, y en condiciones de baja luminosidad; las lee todas, salvo que estén tapadas".

Estas no son las únicas cámaras que vigilan a los ladrones de coches. Hay otras que, en ocasiones, les pillan in fraganti, como la de un lavadero que graba cómo el ladrón aparca y le hace una pregunta a la víctima, mientras su compinche aprovecha para montarse en el coche y salir a gran velocidad. Otra del interior de un parking capta cómo los ladrones abren un vehículo y se lo llevan empujando fuera del alcance de las cámaras.

Los ladrones actúan con descaro. El 90% de las veces lo hacen en la calle. A Vicente Serrano le robaron el coche en pleno día. "A las 8:00 horas entró mi mujer al instituto. Cuando salió a las 15:00 horas, no había coche. No había ningún cristal roto, ni ningún indicio de que hubiesen manipulado bombines ni nada", contó a Equipo de Investigación. Y es que los ladrones no dejan rastro.

*El contenido al que hace referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2016 que laSexta ha vuelto a emitir este jueves.