El candidato del PNV, Iñigo Urkullu, se ha convertido de nuevo en lehendakari en segunda votación con el apoyo de los diputados de su partido (28) y los del PSE-EE (9). Los 37 votos obtenidos le han bastado para alcanzar la mayoría simple requerida en esta segunda votación, y quedar por encima de la candidata de EH Bildu, Maddalen Iriarte, que solo ha logrado el apoyo de los 18 diputados de su partido. Erkarrekin Podemos y PP se han abstenido.

Es la cuarta vez que PNV y PSE-EE sellan una coalición de Gobierno. Desde 1986, el PSE ha sido un socio habitual del PNV dándole su apoyo para la designación o incluso formado gobiernos de coalición como el de esa tercera legislatura. En la legislatura de 1990, por ejemplo, entró en el Gobierno de Ardanza después de que EA abandonara el Ejecutivo que compartía con nacionalistas y con EE. En 1994 se reeditó la coalición entre PNV y PSE, que se rompió abruptamente tras la dimisión de los consejeros socialistas en 1998 por sus desencuentros con los nacionalistas.

La relación entre los dos partidos se debilitó con la llegada de Ibarretxe. A partir del segundo mandato del lehendakari nacionalista, el PSE formó un frente con el PP que se opuso a las pretensiones soberanistas del conocido como “Plan Ibarretxe”. Populares y socialistas votaron conjuntamente la designación de Patxi López como lehendakari por dos veces: la primera, sin éxito, y la segunda convirtiendo a López en el primer lehendakari no nacionalista. Durante la legislatura pasada, con Iñigo Urkullu en Ajuria Enea, las dos formaciones políticas retomaron las buenas relaciones. Con el lehendakari gobernando en minoría, PNV y PSE-EE sellaron un acuerdo de estabilidad política y presupuestaria que aseguraba la gobernabilidad al Ejecutivo de Urkullu. Ahora, socialistas y nacionalistas vuelven a formar coalición 18 años después.