El príncipe Guillermo parece que no ha nacido para ser boxeador. Eso al menos piensan los Aruser@s, que le ven como un hombre "blandengue" en cuanto a pegada.

El príncipe Guillermo hizo una visita a la antigua sede de los Juegos Olímpicos de Londres en 2012, para celebrar los 10 años de Coach Core, una organización benéfica que brinda aprendizajes de entrenamiento en deportes de impacto a los jóvenes.

Aunque lo dio todo e incluso puso "mirada de tigre", el príncipe Guillermo estuvo a punto de ser arrollado por el saco de boxeo.