Más de cuatro millones de personas siguen sin vacunarse contra el coronavirus en España, según lamenta el ex secretario general de Sanidad José Luis Martínez Olmos. Sin embargo, y ante aquellos que aún se resisten a ponerse la vacuna, Al Rojo Vivo repasa los números que avalan su efectividad, tal y como se muestra en el vídeo que ilustra estas líneas.

Y es que el Ministerio de Sanidad ya ofrece sus datos epidemiológicos desglosados entre aquellos que se han vacunado y quienes no han recibido ninguna dosis de la vacuna.

El primer ejemplo de la diferencia entre ambos grupos lo vemos con claridad en la incidencia acumulada: según el último informe de Sanidad, este parámetro se sitúa en 31,2 casos por 100.000 habitantes entre las personas vacunadas. Sin embargo, entre los no vacunados la incidencia es de más del doble: 77,9 casos de COVID-19 por 100.000 habitantes.

En cuanto a la tasa de hospitalizados, la diferencia también es evidente, especialmente en los grupos de mayor edad: entre los 60 y los 79 años, la tasa de hospitalización es del 2,8 entre los vacunados y se multiplica hasta por 16 en el caso de quienes no lo están, alcanzando el 46,2. En mayores de 80 años también se aprecia un importante escalón: la tasa de hospitalización está en el 7,5 entre los vacunados y se dispara hasta el 43,7 en no vacunados.

En las Unidades de Cuidados Intensivos la diferencia es asimismo abismal. Así, en la franja de edad de entre 60 y 79 años, la tasa de ingresados en UCI se multiplica hasta por 23 en el caso de los no vacunados: se sitúa en el 0,4 para quienes sí están vacunados y en el 9,4 entre los que no. En los mayores de 80, se multiplica por 16 entre vacunados y no vacunados: está en el 0,2 en quienes se han vacunado y en el 3,2 entre los que no.

El dato más demoledor, la tasa de fallecidos, también confirma de manera muy clara la efectividad de la vacuna: entre los 60 y los 79 años, la tasa de mortalidad se multiplica por 14 entre vacunados y no vacunados, situándose en el 0,2 en el primer grupo y en el 2,9 en el segundo. Una diferencia que aún es más dramática en los mayores de 80: la tasa de muertes es del 1,6 en aquellos con la pauta completa y se multiplica por ocho en el caso de los no vacunados, hasta el 12,8.