Salvo sorpresa, Carles Puigdemont reaparecerá este jueves en Barcelona durante la sesión de investidura en la que Salvador Illa se convertirá en president de la Generalitat. Sin embargo, la posible detención del líder de Junts podría acabar en una entrada en prisión provisional.
"La prisión provisional no es inevitable, es posible acordar otras medidas que tengan una injerencia de menor entidad", explica en Al Rojo Vivo el magistrado Joaquim Bosch.
No obstante, todo apunta a que podrá participar en la votación a la que se someterá el candidato socialista incluso aunque sea enviado a la cárcel.
"En el pasado, el Supremo autorizó mecanismos de delegación de voto para que el voto computase, como en el caso de Junqueras. Se le podría autorizar para que delegase su voto o incluso a que compareciera en persona en el Parlament", concluye Bosch.