Los expertos coinciden en que uno de los motivos por el que los terremotosestán resultando tan mortíferos y devastadores en Turquía y Siria es el estado de los edificios. Aunque en los últimos años Turquía ha ido adoptando una nueva normativa para que sus edificios estuvieran más preparados para soportar los temblores, esta adaptación es lenta y cara.

¿Cómo debe ser un edificio 'antiterremotos'? El objetivo es que la edificación absorba las ondas sísmicas, que se mueva pero evite que se parta el hormigón.

En un edificio normal, los daños se concentran habitualmente en la planta baja, que deja de poder soportar las cargas verticales y es entonces cuando el edificio se desploma. ¿Cómo evitarlo? Para ello hay que buscar un equilibrio entre la resistencia y la ductilidad, es decir, la capacidad para deformarse sin romperse.

Esto se consigue con pilares y vigas de mayores dimensiones y más acero y hierro en estas construcciones. Además, los pilares deben ser más resistentes que las vigas para que, aunque el edificio pueda sufrir daños, no se acabe desplomando.

Estas características se aplicarían a los edificios de nueva construcción, pero, ¿qué ocurre con los edificios antiguos? ¿Cómo reacondicionar las construcciones ya existentes para hacerlas más resistentes frente a un seísmo?

Hay varias técnicas, como añadir muros de hormigón armado, barras diagonales o muretes laterales junto a los pilares. También es posible reforzar esos pilares con acero, hormigón o incluso mezclas de resinas; instalar disipadores de energía o bien apoyar el edificio sobre elementos de goma.