Hubo un tiempo en Madrid en que los políticos entregaban llaves de pisos de protección oficial a bombo y platillo. Con muchos besos, muchos niños, aplausos y grandes sonrisas. Pero luego aparecieron los fondos buitre: la comunidad de madrid vendió mucha de esa vivienda social a fondos que buscan puro beneficio. Uno de ellos, Blackstone y su filial española, Fidere. Las consecuencias no tardaron en verse.

Es el caso, entre muchos tantos, de un grupo de vecinos de Torrejón de Ardoz que pasó de vivir con un alquiler de algo más de 400 euros al mes a tener que pagar 900, más del doble. Además, el fondo empezó a exigirles el IBI y los gastos de comunidad, un dinero que antes no debían pagar. Ante esta situación que tildaron de abusiva, se unieron, llamaron al sindicato de inquilinas y denunciaron.

Y han ganado. Una decisión que celebran personas como Felipe Soto, con quien ha hablado laSexta. Su mujer, sus dios hijos y él pueden volver a vivir tranquilos. Pagaban 435, pero les pedían el doble. Tras el acuerdo, se les quedará 165 euros más al més con un nuevo contrato por siete años, y otros tres prorrogables. "Hemos ganado una pequeña batalla contra ese Goliath", ha contado Felipe a esta cadena.

Esta victoria , por supuesto, no ha sido nada fácil. Lo cuenta Patricia Aparicio, otra de las vecinas que ha logrado derrotar al fondo buitre, un camino no exento de obstáculos. "Ha habido días en los que no dormía, me levantaba mal porque no sabes si te vas a quedar o te vas a ir, con la inquietud de no saber lo que iba a ocurrir", ha explicado Patricia. El sindicato de inquilinos animan a todos los que estén en una situación parecida a unirse y denunciar.